El SEO constituye una parte muy importante del marketing digital y de los negocios en internet. En el posicionamiento web básicamente hay dos áreas en las que se debe trabajar: El SEO On Page, que está relacionado con todos los elementos internos del sitio web; y el SEO Off Page, que abarca todas las acciones que realizas fuera del website.
Dado que para un usuario no profesional del SEO es más fácil retocar el contenido de su sitio, las siguientes recomendaciones van a ser de gran utilidad para quienes deseen mejorar el SEO On-Page.
También serán útiles si eres redactor SEO, puesto que darás un servicio mucho más completo si entregas el texto optimizado para SEO.
Títulos
Para una página cualquiera, a nivel de SEO existen dos títulos:
- El título SEO o metatitle. Éste es el que toma en cuenta Google para los resultados de búsqueda. Por lo general, es modificado (optimizado) por el especialista SEO.
- El título H1. Es el título que lee el usuario cuando está dentro de la página. Casi siempre lo escribe el autor del contenido, aunque también puede ser objeto de cambios por parte del consultor SEO.
Actualmente hay una gran controversia debido al anuncio de Google respecto a los títulos de las páginas.
Te resumo la situación: la empresa ha dicho que en un porcentaje de los casos (20% aproximadamente) no usará el título SEO sino uno formado (mediante Inteligencia Artificial) por el propio motor de búsqueda basándose en el contenido y en la relación con la consulta realizada por el usuario.
Teniendo en cuenta esta declaración de Google es conveniente que ambos títulos (metatitle y H1) sean muy similares.
Incluye en el título SEO el elemento de confianza (o de información) que consideres necesario para que las personas hagan clic.
Procura que no exceda de 65 caracteres; de lo contrario, Google lo truncará y el lector no verá completo el titular. Para conocer más técnicas que te ayuden en tus titulares, te recomiendo leer el post Cómo optimizar un meta-title.
Metadescripción
Es el texto que acompaña al título en los resultados de Google. Puedes verlo aquí:
Se utiliza para dar un contexto al usuario sobre el contenido que va a encontrar en la página. Por tanto, es el segundo elemento en Google que leen las personas. De allí su importancia.
Para la metadescripción tienes alrededor de 140 caracteres disponibles.
Al ser más larga que el título, puedes emplear un argumento que complemente al título y que a su vez, incite al usuario a visitar la página.
Es lo que en copywriting denominamos un gancho: una frase o palabra que despierte en el lector una inquietud, o le toque un punto álgido, para motivarlo a leer el post completo.
En cuanto a los aspectos técnicos, la metadescripción debe contener la palabra clave principal del artículo y, de ser posible, alguna palabra clave secundaria.
En ocasiones es recomendable incluir emojis o caracteres especiales que llamen la atención y destaquen en las páginas de resultados de Google (SERPs). También puedes seguir los preceptos recomendados para los metatitles.
Subtítulos
Un buen contenido tiene estructura. O sea, está dividido en bloques informativos relacionados entre sí. De preferencia, estos bloques deben presentarse en orden de importancia (primero los más importantes), aunque no es obligatorio.
Cada bloque o sección tiene un encabezado al que llamamos subtítulo.
Una sección puede anidar a otras secciones, conformando así una estructura jerárquica, como se muestra en el siguiente esquema:
Los subtíitulos no tienen límite de longitud, pero recomiendo hacerlos del tamaño de un título o incluso más pequeños. En el apartado Tablas de contenido de este artículo te explicaré porqué.
Si has realizado una investigación de palabras clave, habrás obtenido un listado de keywords que deberías usar en el texto.
Algunas de ellas probablemente coincidan (o puedes hacerlas coincidir) con los subtemas del artículo, por lo cual desde el punto de vista de SEO On Page resulta beneficioso incluir estas keywords en los subtítulos.
Imágenes optimizadas
Las imágenes son el acompañante natural del texto. Sirven para ilustrar una idea, para llamar la atención, recrear la vista, descansar la lectura, graficar un concepto, completar una explicación, en fin, para muchas cosas. Podríamos decir que son indispensables.
Si bien debes incorporar imágenes en tus páginas, también es cierto que exigen ciertas atenciones de SEO On Page, tales como:
- Utiliza imágenes horizontales para la versión de escritorio de tu página web, e imágenes verticales para la versión móvil. Esto hará que tu web sea responsive. Google favorece a este tipo de sitios y los usuarios te lo agradecerán.
- Procura que el tamaño del archivo de imagen no exceda de 100KB. Utiliza complementos que reduzcan el peso de los archivos, como TinyPNG para WordPress o EWWW image optimizer. Si no sabes cómo integrarlos en tu sitio, consulta con un programador.
- Llena el texto Alt de cada imagen. Este es un factor de SEO On Page muy importante. Escribe la palabra clave principal como texto alternativo de la imagen principal. Haz lo mismo para las imágenes y palabras secundarias.
Tablas de contenido
Las tablas de contenido actúan como el índice de un libro. Se suelen ubicar en la parte superior de la página o en la barra lateral. Sirven para indicar al usuario dónde está la información que desea ver. Un ejemplo de esto lo encontramos en el sitio citapreviadni.
En este site cada página tiene varias secciones de información. Para facilitar la tarea de ir directamente a la sección que le interesa, el usuario solo tiene que hacer clic en el ítem correspondiente de la tabla de contenido.
Desde el punto de vista de SEO On Page, las tablas de contenido traen dos beneficios:
- Los ítems de la tabla son enlaces que incluyen palabras clave. Lo cual constituye una práctica recomendada por Google.
- Estos ítems también pueden aparecer en las páginas de resultado debajo de la metadescripción, lo que aumenta las posibilidades de clic. Como en el siguiente caso:
Negrita e itálica
Emplear fuentes tipográficas en negrita e itálica, además de la función visual de destacar el texto para el usuario, también le indica a Google que en ese contenido resaltado hay algo importante. Es decir, en ese texto hay palabras clave.
Utiliza la negrita y la letra cursiva para resaltar cosas de forma natural, sin exagerar, porque de lo contrario podrías caer en keyword stuffing, o abuso de palabras clave.
También puedes combinar tipos de fuente o variar el color de las mismas para obtener un efecto similar que llame la atención.
Taxonomía
El hecho de que este ítem sea el último de la lista no significa que sea menos importante. En SEO la taxonomía se refiere a la forma de clasificar la información dentro del sitio.
A grandes rasgos, el contenido de un sitio web está compuesto por alguno de los siguientes formatos:
Tipos de post: páginas, entradas (de blog), productos (de ecommerce), y posts personalizados (servicios, miembros de equipo, testimonios, y muchos otros).
Categorías: Una clase que agrupa a un conjunto de tipos de post según un criterio definido. Si tenemos un ecommerce de ropa, una categoría puede ser ropa femenina.
Subcategoría: Una categoría dentro de una categoría. Siguiendo con el ejemplo anterior, una subcategoría de ropa femenina puede ser blusas.
Etiquetas: Sirven para agrupar tipos de posts por un atributo importante que no se corresponde con un criterio de categoría. Por ejemplo: en un portal de noticias tenemos la categoría deporte, la subcategoría fútbol y una etiqueta podría ser Real Madrid, ya que es un tema relevante dentro del fútbol.
En sitios con gran cantidad de contenido, la taxonomía influye sobremanera porque permite que el usuario encuentre la información fácilmente.
Para Google también es importante porque le ayuda a entender la estructura del sitio.
Si deseas conocer un poco más, puedes leer cómo asignar categorías y etiquetas en un sitio web.
Los mencionados en este artículo no son los únicos factores de SEO On Page que debes tener en cuenta. Existen muchos otros, como los datos estructurados (Schema), el enlazado interno, la velocidad de carga, etc. Sin embargo, ya tienes una lista para empezar a mejorar aquellas deficiencias que veas en una página web.